CHAVALES, ¿JUGAMOS AL RUGBY O QUÉ?

Fueron las palabras de Igor Genua, capitán de Hernani, en las primeras Series Nacionales de Seven, que por cierto se televisaron íntegras en directo por Teledeporte en TV y Televeo en Internet. Su club jugaba ante Alcobendas y los jugadores madrileños se habían desquiciado por unas controvertidas decisiones arbitrales que les perjudicaban. Resultado, los hernaniarras ganaban el partido aprovechando la superioridad numérica ante su rival.

Desquiciada se ha mostrado la FER esta última semana. Recapitulemos: El día 29 de julio se anuncia el choque de Olympus ante Stade Français y el día 30, a la tarde siguiente, se hace pública la no participación del combinado español en la Amlin Cup. No hay más que recapitular, empieza la guerra.

No voy a entrar en los desafortunados tweets con el perfil oficial de la FER (1 de agosto) cargando contra los jugadores de Seven, ni en el comunicado que hace la FER (2 de agosto) desmintiendo unas informaciones que no sólo de por sí son verdaderas sino que más valdría en Ferraz estudiarlas y depurar responsabilidades, ni mucho menos voy a entrar en asuntos de despachos de los cuáles mis compañeros de la prensa conocen e INFORMAN (Patada a Seguir – 2 de agosto) bastante mejor que yo.

El asunto es el siguiente: ¿Qué ocurre a partir de ahora en el césped? ¿Jugamos al rugby, o qué?

Basemos este escrito en tres pilares: Coordinación entre tesorería y dirección deportiva, lógica deportiva y situación de los jugadores.

Coordinación entre tesorería y dirección deportiva: Se ha evidenciado que no existe tal coordinación. Sin entrar en las funciones del departamento de comunicación, no se puede publicar que el día 29 el primer rival de la competición y el 30 dejar la competición. Si es el apartado económico a lo que la FER alude para retirarse de la Amlin ¿Por qué cogió esa plaza antes de saber si podía participar? Y, sinceramente, no sirven los argumentos del comunicado, no sirven. Igual que se puede calificar de valiente la actitud de la FER al asumir la competición europea no deja de ser un error garrafal el retirarse ahora, sea por los motivos que sea.

Lógica deportiva: Se cargan tintas contra Tomy García y se le echa la culpa de todo. Sigo pensando, en contraposición de lo que me han contado, que puede tener culpa pero desde luego no toda la que se le echa encima. En la FER hay un responsable máximo y en la parcela deportiva no se le está achacando nada, todo va para Tomy y eso no puede ser.

Por otra parte, no seré yo quien corrija a Inés Etxegibel pero parece que poner a Tomy al frente de las chicas, a tres años de los Juegos, es cuanto menos arriesgado. También lo fue el nombramiento de Boris y salió bien, así que de momento dejaremos el calificativo “arriesgado”. Si bien es cierto que estando Yunque, Socías o el propio Tiki no parece muy lógico que el último se vaya con los tres cuartos del XV y el director deportivo se quede con la perla deportiva de la FER que son las chicas del Seven.

Después están los contratos de los profesionales perfil FER. Contratos que ya no existen y que pasan a ser de anuales con remuneración mensual más primas a acuerdos por concentración de la Selección de XV (alrededor de 1000 euros), con la de Seven (algo más de 500) y con Olympus, antes de la retirada (cerca de 500). Es decir, un jugador que vaya a los seis partidos de la ENC y digamos a otras tantas citas de las World Series se lleva 9000 euros al año, que espero que sean netos –no tengo ese dato- porque si no es poco menos que una miseria por dedicar tu vida al rugby. Esto sin contar con que si te lesionas estas jodido.

Obviamente la dedicación no va a ser la misma y, mientras las concentraciones para el XV rondarán la semana de trabajo previa al partido, se está hablando que los jugadores de Seven puede que se junten dos días antes de las World Series, no merece la pena ni detenerse en esto, habla por sí sólo.

Por último, Santi Santos fue nombrado antes de la retirada de Olympus de la Amlin. En una entrevista que publicaré mañana, él mismo cuenta como “Es una lástima desde el punto de vista deportivo, pero a lo mejor es un suicidio económico”. En cualquier caso entiendo, y así me lo dijo él mismo, que los jugadores ya estaban distribuidos. Unos para el XV, otros para el Seven (que también jugarían el XV) y un grupo de jugadores en desarrollo que entrarían en los planes para la competición europea. Ese grupo ya no existe, así que a ver que hacemos ahora cuando se nos vayan perdiendo jugadores por el camino.

Situación de los jugadores: Si no fuera porque es para llorar me descojonaría. De todo lo que puede hacerse mal esto ha sido lo peor. Resulta que ahora, a últimos de julio no se harán contratos profesionales. Teníamos doce jugadores que la pasada campaña confiaban en seguir trabajando para la FER y a últimos de julio se les dice que eso no va a ser así.

Un contrato profesional te lo pueden renovar o no, pero no se pueden quitar de un plumazo y mucho menos a final de julio. Esto se habría arreglado al final de las series mundiales con un “señores búsquense la vida porque el año que viene no hay dinero para esos contratos”. De acuerdo, puedes negociar con un club español o irte a Francia a Pro D2 o Fed 1, por poner unos ejemplos. Tenemos a varios jugadores para los cuáles ese contrato que se iba a ampliar en la 2013/14 era su forma de vida y ahora mismo están tirados en la calle.

No quiero citar nombres que puedan perjudicar futuras contrataciones pero un ejemplo claro, para que todos me entiendan, es el de Jaike Carter. Un jugador al que se le ofreció hacer un master en Inglaterra, obviamente becado para jugar al rugby, y dijo que no pues confió en que sería uno de esos contratos profesionales en España. Fue una apuesta personal, es decir voy a ver si me renuevan y si me sale bien perfecto y si no pues mala suerte. Pero es que ahora se encuentra con que no renuevan a nadie y obviamente se vuelve a Inglaterra sin master, aunque afortunadamente podrá jugar en la Universidad, pero también sin ninguna gana ni de volver a España ni de saber nada de la FER.

El problema de fondo es que veremos que piensan ahora los jugadores. Lo que tenemos son unas becas por jugar al rugby. Hemos vuelto al pasado y si no cambian las cosas tendremos un grupo de jugadores que tendrán que trabajar para vivir. Si no eres profesional no puedes competir contra profesionales y volveremos a ver aquel España-Rumanía de Gijón donde un destrozado Jon Magunazelaia comparecía en rueda de prensa para decir que lo único que quería era volver a su casa.